domingo, 23 de julio de 2017

Feminismo (I)

Llevo mucho  tiempo queriendo hablar sobre libros de feminismo porque me preguntáis muchísimo por ellos. Antes de nada una cosa quiero dejar clara: yo no tengo ni idea de casi nada; todo lo que voy aprendiendo es a través de artículos, libros que voy descubriendo por internet y documentales. Esto es solo mi experiencia y los libros que han ido formándome.

¡EMPECEMOS!

Hasta 2015 no sabía qué era el feminismo. Pero es que ni sonarme, eh. Menos mal que existe internet y las redes sociales: ahí descubrí a Chimamanda y su charla (https://www.youtube.com/watch?v=hg3umXU_qWc). Y así, de golpe, descubrí que existía el feminismo. 


Obviamente me compré el librito (y el segundo también, en cuanto salió) porque aquí la loca que compra libros compulsivamente no sabe controlarse.

El caso es que me gustó y me hizo pensar. Es sencillo, perfecto para empezar. Pensé mucho, en cómo me habían educado mis padres (sin saber lo que es el feminismo ellos me han dado un buen ejemplo), en cómo había sido mi vida, etc., y decidí que quería saber más.

Mi siguiente encuentro fue con Virginia Woolf. Mi Virginia. Una habitación propia llegó justo cuando lo necesitaba, cuando más deseosa estaba de conocer a mujeres escritoras. Y fue con este libro con el que decidí que quería formarme, que quería aprender todo lo que pudiera sobre feminismo; podría decirse que creó un mini monstruo ansioso de conocimiento. 

Además puedo decir, felizmente, que ahí comenzó una bonita relación con Woolf (espero que dure mucho). Y que Las olas es un tesoro.



A partir de ese momento las autoras empezaron a cruzarse en mi vida sin que yo pudiera -y quisiera- evitarlo. Hice sitio para la poesía, para las autoras de la generación beat, que me hicieron querer escribir, abrirme en canal ante la hoja, vaciarme y diluirme con ellas. 


Por casualidad encontré este libro de Rosa Montero y lo convertí en algo así como una biblia en la que reencontrarme continuamente. Aquí da voz a mujeres que conocía; también a otras que no sabía que existían, que eran increíbles. Algo fundamental para mí ha sido conocerlas a ellas (artistas, científicas, escritoras, maestras...), conocer sus vidas, querer entenderlas y aprender todo lo posible.

Por supuesto yo también llegué a la fiebre de Caitlin Moran. Leí Cómo ser mujer, me divertí, me resultó entretenido y después leí Cómo se hace una chica y ahí se acabó nuestra historia. Cómo se hace una chica me resultó infumable, estuve a punto de dejarlo mil veces. Después seguí leyendo y empecé a ver cosas en Moran que no me gustaban, que me chirriaban. Veía su libro en cada lista sobre feminismo y me sentía escéptica. He tenido que leer mucho y releer a Moran para ver qué era lo que no me gustaba: su frivolidad, la continua ironía con la que aborda cada tema. Me di cuenta de que su libro, una mezcla de memorias con las que solo busca provocar, no me había enseñado realmente nada. Eso no significa que no sea un libro importante, no no: ha conseguido darle visibilidad al feminismo, despertar algo en la gente, y eso es algo que debemos valorar muchísimo.


Siguiendo en esa línea de libros que al principio me parecían lo mejor y acabé sintiendo un pelín de rechazo llega Teoría King Kong. Cuando lo leí me impactó: nunca había encontrado a nadie que me hablara de todo esto con tanta claridad, de forma tan directa, sin pelos en la lengua. Pero cada día intento aprender un poco más y reconozco que no tengo una postura clara sobre la prostitución (algo que aborda Despentes) porque no he leído suficiente y no quiero hablar sin tener ni idea (pero ya os digo que no me termina de gustar lo que se defiende en este libro).


El libro de Femen me estaba encantando, en serio. Todo lo que reflexionan sobre la Iglesia me parecía vital, todo iba bien. Iba. Entonces llegué a la última página y leí lo siguiente: 
"Uno de los reproches que se nos hace es que practicamos un sexismo invertido. No es completamente falso. Nuestras chicas deben ser deportistas para poder hacer frente a pruebas difíciles, y bellas para que puedan utilizar sus cuerpos".
Ahí dije hastaluegomaricarmen y quise llorar. Sin embargo, me gustaría ser positiva y quedarme con lo que aprendí, que es lo importante.


Uno de los mejores descubrimientos que me ha traído el feminismo: las chicas de Glitter Zines. Unen poesía y fotografía para crear pequeños libros tan bellos como estos (mirad su arte).




Buscando libros para esta entrada me di cuenta de que eran demasiados, así que lo he dividido en varias partes. Hasta aquí la primera. Si tenéis sugerencias sobre más libros o queréis debatir, estoy más que encantada :)


8 comentarios:

  1. Me he leído casi todo lo que me traes aquí. Empecé con Caitlin Moran, y a diferencia de lo que comentas, como ya te escribí en la carta que envié, mi idea de ella es bastante opuesta, pero admito que puede llegar a sonar frívolo que lo que cuente lo haga con un toque de humor. Aun así, ambas coincidimos en que es necesario porque después de ella ha habido una visibilización bestial de muchísimas mujeres, y eso me gusta muchomucho. Después de ella empecé a leer más sobre feminismo, releí Persépolis que ya me lo había leído hace tiempo, y las mujeres que aparecían en la historia que me daban en la carrera cogieron más y más fuerza.
    Después leí a Chimamanda, y me supo a poco, como te comenté. Me parece que da un mensaje claro y que, para la gente que empieza, es bastante bueno e ideal. Aun así me compré el segundo (que aún no me he leído), pero que espero que me llene más porque el primero lo vi muy flojo para el feminismo que yo ya sentía, supongo que lo leí tarde, por eso la he dado otra oportunidad.
    Después de ella vinieron Sylvia Plath, Virginia Woolf (con el mismo libro además, que es precioso y me encantó.) y Carmen G. de la Cueva, Kate Bolick, y quiero que sigan, que se queden y que me enseñen el feminismo que aún se me escapa. Hoy he empezado «La Carne» de Rosa Montero, y aunque ya la leí hace un tiempo con su, ni más ni menos, su primera novela, me apunto el de Historia de las Mujeres porque ella escribe que da gusto y me parece una mujer increíble ♥
    El libro de Femen me lo apunto también, aunque tengo en mi estantería muchos libros sobre historias de mujeres, y tengo muchísimas ganas de leer. Considero, además, que leer sobre feminismo es también leer sobre mujeres, leer a escritoras, porque en ellos se puede ver una parte de esa lucha que muchas de ellas llevaron dentro.

    En cuanto a los libros pequeñajos, soy más de otro estilo, aunque considero que el boom que veo ahora de mini-fanzines sobre feminismo es muymuymuy necesario, de hecho me gustaría comprarme algunos que he visto por tu instagram o incluso hacer alguno, quién sabe. (Si haces uno tú te lo compraría encantada)

    Ay, S., ojalá sigas leyendo tanto y nos sigas trayendo entradas así. Con ganas e impaciencia espero la próxima entrada sobre feminismo. Es que leer y conocer a personas como tú que leen tanto, hace que el feminismo se nos acerque rápido, certero y que se instale para hacernos invencibles con ayuda de todas.

    Abrazos fuertes
    y cosquillas.

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    1. Cuando leí a Moran no detecté nada que me disgustara -algunas partes se me hicieron pesadas y no terminaba de convencerme- porque es un mensaje que entra a la perfección; sin embargo, leyendo más analicé comentarios que se salían de tiesto. Pero lo importante, como decimos, es lo que ha traído, y eso no se le puede negar.
      Tengo muy muy pendiente leer Persépolis porque adoro la película <3
      Montero es imprescindible en mi vida, tanto que acabé haciendo un trabajo sobre su obra y lo disfruté mucho.
      El libro de Femen mejor déjalo para más adelante porque el final te va a enfadar un poco -me mató eso de sexismo invertido, en serio.

      Mil gracias por tus comentarios siempre, tengo muchas ganas de seguir hablando de feminismo y de aprender de todas vosotras :)

      Muchos besos

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  2. Yo también he leído la mayoría de los libros que has traído y estoy emocionada. Querida Ijeawele lo he regalado un par de veces porque es tan sencillo y tan claro que para empezar me parece perfecto. También he leído La flor púrpura, que además ha salido en una edición preciosa, y me gustó muchísimo por todas las cosas que se pueden aprender de la cultura nigeriana y la profundidad de los personajes que presenta.
    Un cuarto propio de Virginia Woolf también fue una de mis primeras lecturas feministas y me animó a seguir aprendiendo. Que un libro consiga eso ya es un triunfo de por sí, ¿no crees? No he leído nada más suyo, pero tengo pendiente Orlando y seguiré tu recomendación (no sabes la cantidad de libros que tengo apuntados gracias a ti).
    En cuanto a Caitlin Moran, tengo que reconocer que me gustó. En algunas cosas no coincidí con ella y en otras sí, pero me hizo pensar sobre muchos temas, discutir conmigo misma y con lo que leía, y tiene un estilo bastante atractivo que puede ayudar a difundir el movimiento, así que creo que ha hecho una labor importante. Al fin y al cabo, el feminismo no es homogéneo y es normal diferir en algunas cosas, mientras sea desde el respeto a las experiencias de las demás mujeres.
    El resto los apunto, y espero con muchas ganas lss próximas entradas. No miento si te digo que eres mi cuenta favorita en el mundo por lo que te admiro al ver lo mucho que lees. Ojalá más gente con esas ganas de aprender y esa capacidad para contagiarlas.
    ¡Un beso grande y gracias!

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    1. Tuve que decidir entre La flor púrpura y Algo alrededor de tu cuello y ay. Pero leeré La flor púrpura pronto (espero). Medio sol amarillo es una bestialidad de libro, sobre la guerra entre Nigeria Y Biafra, es desgarrador.
      Creo que todas coincidimos en eso sobre Caitlin pero sigue teniendo cosas que chirrían demasiado y por eso me gustó mucho Mala feminista de Roxanne Gay, porque me llevó a reflexionar sobre cosas que ni me había dado cuenta y, sobre todo, a fijarme en que el feminismo que leía era sobre todo de mujeres blancas occidentales, y eso es limitar mucho el aprendizaje.

      Muchas muchas gracias, comentarios así hacen que cueste menos escribir con este calor.

      Un abrazo gigante

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  3. Pienso igual que tú en cuanto a Morán, divertido y genial y al mismo tiempo se pasa de frívolo. El humor a veces oculta la crítica y neutraliza la acción. Soy muy de humor pero como en todo, a pequeñas dosis. Qué gusto estás entradas!! Yo llevo ya muchos años sensibilizada pero no me da la vida para leer tanto. A veces me conformo con las reseñas! ;-)

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    1. Además conforme vas leyendo más artículos y libros vas viendo que Moran tiene unos comentarios que son lo peor. Exacto: el humor bien, pero tampoco nos pasemos.
      ¡Vamos a necesitar mil vidas para todo lo que hay por leer!

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  4. Al leer tu entrada me ha dado la sensación de que todas las que hemos sufrido el mismo proceso (impacto en redes sociales, curiosidad e inmersión total en libros/artículos, etc.) nos hemos topado con muchos libros que han hecho que hiciéramos click o nos diésemos el golpe de cabeza. Más o menos hemos llevado el mismo camino, y creo que estamos en consonancia en cuanto a postura del feminismo (y para qué negarlo, me gusta encontrarme a personas con ideas similares a las mías en cuanto a feminismo). De ahí que me haya encantado que hagas esta serie, porque yo no he leído tanto, pero sí que hay algunos que yo no he leído y tú sí, otros que yo habré leído y tú no, y me parece una maravillosa forma de aprender y empaparse.

    Te agradezco mil esto, y te deseo lo mejor, porque para mí eres toda una admiración en cuanto a literatura (¡ya me gustaría poder leer tanto!).

    ¡Un abrazo enorme! <3

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    1. Creo que esto es lo bonito de las redes, que vas encontrando personas con las que debatir, compartir ideas y crear una pequeña comunidad en la que aprender y avanzar.
      Mil gracias por pasarte y comentar -y por tus palabras, que me pongo roja.

      Abrazo gigante

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